Repasamos jugando...
Para los alumnos de QUINTO GRADO:
Cuento: interpretación.
Tipos de Narrador:
Uso de los puntos: (para QUINTO y SEXTO Grado)
Test de comprensión lectora:
Ejemplos de Cuentos de Ciencia Ficción (Sexto Grado)
El sueño de un robot
Diego es un robot de clase autómata que tiene el deber de laborar en las minas de Yanacocha, con 160 años de edad sigue prestando un servicio efectivo al 100%, los días libres que tienen son solo para recargar energías y vuelve al servicio. La Gran Revolución Robótica lo vio nacer y la Reforma Robótica Industrial lo hizo ver como destruían a todos sus hermanos.
Este tipo de robots no tuvieron cómo defender sus vidas artificiales porque aunque su inteligencia era muy parecida a la humana, les faltaba eso tan único y nunca encontrado en otro ser vivo que hacía único a sus creadores, el alma.
Aunque era una máquina, estaba hecho para sentir y como trabajaba con el menos 100 mineros era víctima de humillaciones que iban desde pintar su armazón de titanio como orinar encima de él mientras limpiaba el piso. Sus labores consistían en mantenimiento, primeros auxilios, contaduría y hasta encargado de explosivos.
Las humillaciones y el trabajo sin recompensa alguna no lo entristecían, pero sí lo hacían pensar en el porqué de su existencia, para qué fue hecho y cuál era su lugar en el mundo. Nadie respondía a sus preguntas y cada vez que se dirigía a alguno de los mineros, solo recibía insultos y malos tratos, algo que lejos de afectarlo lo hacía pensar en cómo lo trataban sus antiguos dueños.
Hace más de 150 años estuvo en una familia de clase muy alta, cuando su modelo era el más costoso, allí lo tratan bien, si es que algo así existe, nadie lo insultaba, lo limpiaban y pulían a diario, todos sus rayones eran eliminados al instante, y hasta había recibido un nombre.
Ahora todo era distinto, y su nombre solo era usado cuando alguien iba a morir y le imploraba salvarle la vida, aunque supiera que siempre haría lo que tenía programado en su cerebro artificial, rogaran o no.
Un día un temblor dejó a 50 mineros junto a él hundidos en lo más profundo de la mina, estaban a más de 4000 metros de profundidad y cuando sacó sus cálculos les informó a los mineros que el rescate llegaría al menos en 8 meses, un tiempo en el que ninguno de ellos sobreviviría.
Todos de nuevo le dijeron palabras de odio e incluso intentaron destruirlo, aunque su cuerpo estaba hecho de titanio impenetrable sí sintió algo cuando uno de los que intentaba con un pico quitarle un trozo de cabeza se partió una mano, no sabía cómo explicarlo, así que se limitó a decir lo que había aprendido de ese sentimiento luego de haberlo visto por tanto tiempo “jaja”.
Fueron pasando los meses y fueron muriendo por lote todos los mineros, estos ya tenían miedo de él, muchos intentaron destruirlo y la gran mayoría habían muerto por las heridas que se habían causado. Cuando el último murió y en sus últimas palabras lo maldijo Diego volvió a sentir lo mismo que hacía meses “jaja”.
Una vez llegó el rescate salió de la mina y sin mirar atrás se comprometió a seguir sintiendo esa sensación.
El extraterrestre
De vez en cuando me despertaba en la noche sin poder volver a dormir y salía de mi cama para tomar un vaso de agua, en ese entonces encontré a mi nuevo amigo, quien era una persona como cualquier otra y de inmediato nos llevamos bien en la conversación. En mi edificio viven muchas personas y no me pareció extraño que esté en la azotea un chico tan interesante para conversar. Con el tiempo me confesó que no era una persona, sino un extraterrestre, lo cual jamás hubiera imaginado, pero en la planta de sus pies lleva trazos y líneas que son como su fueran el documento de identidad que cada uno de ellos tiene.
Nuestra amistad fue cada vez más fuerte con el tiempo, él me contó sobre todas las cosas que hacía en su planeta y hasta de los viajes interestelares que realizaba con frecuencia. Yo en cambio no tuve más que contar que de vez en cuando tenía conversaciones a través de las redes sociales con personas de otras partes del mundo. Él me ofreció un dispositivo para poder atravesar la pantalla e ir directamente al país de quien estuviera hablando, pero no lo acepté,
Mi amigo con el tiempo me pidió de quedarse a vivir en mi casa y me pareció que estaría bien porque así dejaría de pagar la seguridad del lugar. Con los meses todo se complicó porque él me hablaba de teorías muy conspirativas de su planeta con la necesidad de barrer el mal de la tierra, así lo llamaba. Sin embargo, me di cuenta pronto de que todas las personas que estaban cometiendo algún pecado desaparecían misteriosamente y es que él les quitaba la vida con su rayo PAT que desintegraba en el acto a las personas. Por esta razón tuve que dejar de ver a mi novio y nunca más pensé absolutamente nada sucio por miedo de perder mi vida también. A veces hasta me pregunto si es que este extraterrestre no es más que un fanático de una secta que quiere acabar con todo.
Mundo deshabitado
Esto me pasó un día, me encontraba en mi casa, solo recuerdo haber escuchado una explosión, me desmaye. Al despertarme, todo me parecía extraño, no escuchaba nada a mi alrededor, vi por la ventana, solo vi caos, salí afuera de la casa todo estaba destruido, las calles agrietadas, los árboles derribados, no había señales de vida humana, me asuste tanto de estar solo en un lugar donde todo estaba destruido, me preguntaba ¿qué pasaba? si estaba soñando, tenía que ser una pesadilla, era una alucinación. Cuando de repente veo entre los restos un movimiento, me alegre demasiado salí corriendo, era un pequeño perro, bueno no era una persona pero me alegre de que estuviera con migo para hacerme compañía.
Sobreviví con unas pocas cosas que tenia de comer, nos acomodamos en la casa con Bobby, así le puse al perro, era ya de noche, nos dispusimos a dormir queriendo que a la mañana siguiente fuera todo diferente, pero no al despertar solo me sentía más triste y confundido quería saber que había pasado, ¿porque era yo el único ser humano con vida?
De repente mientras renegaba de lo que me pasaba, escuche que alguien tocaba la puerta de la casa, me alegre pero al mismo tiempo pensé que ya hasta loco me había vuelto, que estaba escuchando cosas, a pesar de eso salí a ver por la ventana, solo vi una enorme luz resplandeciente que me segaba, decidí abrir la puerta, me lleve un gran susto por lo que mis ojos veían, eran una figura extraña, con ropas raras, estaban dentro de una gran nave espacial, inmediatamente me hipnotizaron, porque no sé cómo llegue hasta este planeta en el que estoy, no sé si afligirme más o menos por lo que estoy pasando, estoy en una jaula preso por estos seres , pero por lo menos no estoy solo en este planeta tengo compañía.
No hay comentarios:
Publicar un comentario